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Seguramente hayas escuchado hablar sobre él por ser uno de los ingredientes con más beneficios para el cuidado de la piel. Pero, ¿para qué sirve realmente? En este artículo te explicamos todo lo que esta sustancia puede llegar a hacer por tu piel, qué usos le puedes dar y cómo combinarlo. ¡Sácale el máximo provecho a tu rutina diaria de cuidado de piel!
La importancia del ácido hialurónico
Antes de centrarnos en los beneficios del ácido hialurónico, debemos entender por qué es tan importante. Y es que el ácido hialurónico es un polisacárido que se produce de forma natural en nuestro organismo. Sí, además de estar presente en productos cosméticos también lo está en la piel, los ojos y las articulaciones.
Aún así, a partir de los 30 años sus niveles descienden de forma natural. Como consecuencia, la piel empieza a perder hidratación y aparecen los primeros signos de la edad como líneas de expresión, patas de gallo, etc.
Por ello, incluir productos faciales con ácido hialurónico conseguirás aumentar la hidratación, combatir estos símbolos y aumentar su capacidad de regeneración.
Beneficios del ácido hialurónico
Ahora que ya sabes por qué es importante incluir este agente hidratante en tu rutina de cuidado facial, vamos a desvelarte sus múltiples beneficios y funciones.
- Acción hidratante intensiva: el ácido hialurónico ayuda a retener hasta 1000 veces su peso en agua. Un gramo puede llegar a contener hasta seis litros de agua. Esto lo convierte en uno de los hidratantes por excelencia, manteniendo la piel renovada y con un aspecto sano, terso y suave.
- Combate los signos de la edad: como consecuencia de su acción hidratante, el ácido hialurónico tiene un eficiente poder antiaging. Rellena arrugas y líneas de expresión y reduce el efecto del paso del tiempo en el rostro como ningún otro ingrediente.
- Estimula la producción de colágeno y elastina: el ácido hialurónico ayuda a estimular la producción de colágeno. Esta es una proteína esencial para mantener la elasticidad y firmeza de la piel y protegerla de agentes externos como la contaminación.
- Reparación de la barrera cutánea: más allá de sus beneficios estéticos, también protege la piel de los daños ambientales y mantiene una correcta estructura.
- Facilita la reparación celular: con una acción intensiva, el ácido hialurónico contribuye a regenerar los tejidos de forma eficiente y rápida.
- Preparador y reparador solar: en invierno, la piel se ve expuesta a cambios bruscos de temperatura entre las bajas temperaturas y calefacciones. Como consecuencia, su función barrera se ve alterada. Con la producción de colágeno, el ácido hialurónico se convierte en un excelente producto para preparar todo tipo de pieles para el verano.
- Reduce la pigmentación: con su efecto renovador, contribuye a disminuir las manchas de la dermis ya sean solares como originadas por el paso del tiempo.
- Curiosidades que quizá no sabías: ¡No todos los beneficios ocurren en la piel! Un poder que muchos desconocen del ácido hialurónico es su alta capacidad a la hora de hidratar uñas y cutículas. Con su uso diario, tus manos quedarán completamente renovadas.
Combinaciones que funcionan
A diferencia de otros tipos de ácido, su suavidad e hidratación hacen que este ingrediente pueda mezclarse fácilmente con otros para lograr un cuidado con mayor eficiencia. Te presentamos dos combinaciones que no te van a defraudar:
Ácido hialurónico + retinol: mientras que el primero actúa de forma superficial, el retinol nutre las capas a nivel celular. Ambas sustancias comparten beneficios como la estimulación de la producción de colágeno y la regeneración celular. Por esta razón, al combinarlas se amplifican sus efectos positivos.
Ácido hialurónico + vitamina C: el ácido hialurónico proporciona hidratación mientras que la vitamina C se encarga de iluminar y unificar el tono de la piel. ¡Una combinación rejuvenecedora impresionante!
El ácido hialurónico en tu día a día:
El ácido hialurónico se puede encontrar en diferentes formatos como serums, cremas, ampollas o mascarillas. Además, se puede usar libremente en la mañana o incluirse en la rutina de noche. Te explicamos paso a paso cómo incluirlo para aprovechar al máximo sus propiedades.
1. Limpiar y tonificar la piel. Este paso es fundamental, ya que las impurezas, el exceso de grasa y los restos de maquillaje pueden obstruir los poros y dificultar su absorción. Para ello, opta por un limpiador suave como el Gel Osmoclean Nettoyant Pureté. Después, puedes utilizar un tónico que equilibre el pH de la piel.
2. Aplicar el ácido hialurónico con el Sérum Ácido Hialurónico Intensivo. Se recomienda hacerlo en pequeñas cantidades de producto y extenderlo a través de suaves masajes ascendentes.
3. Aplicar un contorno de ojos: la piel alrededor de los ojos es especialmente delicada y tiende a deshidratarse con facilidad. Utiliza un producto específico con ácido hialurónico, como el Contorno de Ojos Ácido Hialurónico Intensivo, para rellenar las líneas de expresión y conseguir un efecto antifatiga.
4. Aplicar una crema hidratante con protección solar durante el día o una nutritiva durante la noche para sellar el ácido hialurónico. Con la Crema Ácido Hialurónico Intensiva, ¡te aseguras conseguir los mejores resultados!
Para sacarle el máximo rendimiento te recomendamos usarlo por la noche, ya que es el momento donde la piel se regenera de manera más intensa. Así, aprovechar mejor sus propiedades. Además, así también evitas el riesgo de que el ácido hialurónico se degrade por la exposición al sol o al calor.
Ahora, ya lo sabes todo acerca de los beneficios del ácido hialurónico. Incluye productos con este componente en tu rutina de cuidado facial y contribuye a mantener tu piel saludable, luminosa y con un aspecto rejuvenecido. ¡No dudes en comenzar a aprovechar sus beneficios ahora mismo!
28/01/2025 
