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La piel está constantemente expuesta a diversos factores que pueden afectar su salud y apariencia. Entre estos factores, el envejecimiento es uno de los procesos inevitables que impacta directamente en la calidad de nuestra piel. Sin embargo, existe una herramienta poderosa en la lucha contra los signos del envejecimiento: los antioxidantes.
El envejecimiento y sus efectos en la piel
La exposición a factores ambientales, la radiación ultravioleta, la contaminación y el estrés oxidativo contribuyen a la formación de radicales libres en nuestra piel. Estos radicales libres son moléculas inestables que dañan las células, desencadenando un proceso conocido como estrés oxidativo. Como resultado, la piel pierde elasticidad, firmeza y luminosidad y empiezan a aparecer arrugas, líneas de expresión y otros signos visibles del envejecimiento.
El papel crucial de los antioxidantes
Aquí es donde los antioxidantes entran en juego. Estas moléculas tienen la capacidad única de neutralizar los radicales libres, contrarrestando así el estrés oxidativo y protegiendo la piel de los daños causados por factores externos.
Los antioxidantes actúan como guardianes celulares, preservando la integridad de las células y estimulando la regeneración celular. Esto no sólo ralentiza el proceso de envejecimiento, sino que también promueve una piel más saludable y radiante.
¿Dónde podemos obtener antioxidantes?
Una dieta equilibrada, junto con otros hábitos saludables como la protección solar y la hidratación adecuada, contribuirá a mantener la salud de la piel a largo plazo. Estas son las principales fuentes de antioxidantes que puedes incluir en tu dieta:
- Frutas y hortalizas: Son excelentes fuentes de antioxidantes, como las vitaminas C, E, betacarotenos y flavonoides. Frutas como las bayas, naranjas, uvas y kiwis, así como verduras de hojas verdes, zanahorias y pimientos, son especialmente ricas en estos nutrientes.
- Frutos secos y semillas: Almendras, nueces, semillas de chía y girasol son buenas opciones para obtener antioxidantes, incluyendo vitamina E y selenio. Estos nutrientes ayudan a proteger las células de la piel contra el estrés oxidativo.
- Té verde: Contiene polifenoles, potentes antioxidantes que pueden ayudar a proteger la piel contra los daños causados por el sol y a reducir la inflamación.
- Aceite de oliva: Rico en vitamina E y polifenoles, el aceite de oliva extra virgen es la mejor opción para cocinar tus alimentos.
- Chocolate negro: Contiene flavonoides, compuestos antioxidantes que pueden ayudar a proteger la piel contra el daño solar. Opta por chocolate con un alto contenido de cacao para obtener mayores beneficios.
- Vegetales crucíferos: Brócoli, col rizada y coliflor son ricos en antioxidantes como la vitamina C y el sulforafano, que pueden ayudar a combatir el daño oxidativo.
Más allá de la alimentación
Además de obtener antioxidantes a través de la alimentación, integrar un producto antioxidante en tu rutina diaria de cuidado de la piel es una inversión valiosa para preservar la juventud de tu cutis.
Estos cosméticos antioxidantes suelen estar formulados con ingredientes activos como la vitamina C, la vitamina E, el ácido ferúlico el resveratrol y no solo combaten el estrés oxidativo, sino que también pueden reducir la apariencia de líneas finas, arrugas y manchas oscuras, proporcionando así un impulso adicional para mantener una piel radiante y saludable.
AGE PROTEOM™: la revolución de los antioxidantes
El sérum antioxidante AGE PROTEOM™ de Institut Esthederm ha marcado un antes y un después con la incorporación de una bacteria extremófila casi inmortal, la bacteria de la nieve, cuyo proteoma está protegido de forma natural por unas moléculas únicas: las chaperonas antioxidantes.
Estas moléculas tienen una eficacia que supera la de todos los antioxidantes conocidos, ya que proporcionan al proteoma de la piel una protección específica, potente y duradera, capaz de ralentizar el proceso del envejecimiento.
A partir de estas moléculas, los laboratorios NAOS han desarrollado la patente Biotecnológica Age Proteom™, que no solo actúa sobre los 5 signos del envejecimiento sino que ralentiza el envejecimiento en un -55%.
Un escudo invisible contra daños y agresiones externas
AGE PROTEOM™ se ha ganado la confianza de quienes buscan una solución completa para el cuidado de la piel. Sus beneficios son evidentes desde las primeras aplicaciones, ofreciendo una experiencia transformadora: la piel se vuelve más suave, recobrando la densidad, una textura sedosa y una luminosidad perdida con el tiempo. Además, la firmeza cutánea se restaura, reduciendo la apariencia de arrugas y líneas de expresión.
Pero además de combatir los signos del envejecimiento, AGE PROTEOM™ también actúa como un escudo protector contra los daños y agresiones externas. La contaminación ambiental, los rayos UV y otros factores estresantes ya no son una amenaza constante, ya que este sérum fortalece las defensas naturales de la piel. Esta protección adicional es esencial para mantener la piel en su mejor estado y prevenir la aceleración del envejecimiento prematuro.
¿Cómo integrar AGE PROTEOM™ en tu Rutina facial diaria?
Los dermatólogos especializados en el ámbito de la belleza respaldan una rutina diaria facial completa para potenciar la salud de la piel. Te proponemos el paso a paso de una de nuestras rutinas estrella para todo tipo de pieles mayores de 25 años:
- Preparación Biológica: Utiliza Crema Desincrustante Osmoclean y la Mascarilla Exfoliante Osmoclean para una limpieza profunda que prepare la piel para absorber mejor los productos de cuidado cutáneo.
- Revitalización: Aplica la Bruma de Agua Celular, rica en antioxidantes, para hidratar y calmar la piel después de la limpieza y exfoliación.
- Longevidad: Opta por Age Proteom™ Advanced Serum. Un sérum altamente eficaz que ayuda a proteger la piel y su estructura proteica, otorgándole un aspecto más luminoso y juvenil.
- Reparación: Concluye tu rutina con una crema hidratante y antioxidante como Eau Cellulaire o Excellage, aplicándola tanto por la mañana como por la noche.
19/01/2024 
